Se trataba de una zona marginal, habitada por unos 60 000 campesinos, llamados guajiros en Cuba, dedicados a la agricultura de supervivencia en tierras de posesión precarias, y también por bandoleros, contrabandistas, fugitivos y terratenientes que imponían su poder a punta de pistola. Los opositores a la figura del Che Guevara también remarcan sus ideas comunistas, a las que consideran totalitarias, y la influencia que tuvo para que Cuba se adhiriera al comunismo y, durante la Guerra Fría, ingresara al bloque comunista conducido por la Unión Soviética.